Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha cambiado su rumbo político hacia medidas de carácter socialdemócrata, presentando propuestas para avanzar en la conciliación laboral y familiar de inspiración keynesiana. Estas medidas formarán parte de la llamada ley de conciliación que el PP presentará en las próximas semanas, siendo catalogada por Feijóo como “la más ambiciosa de la democracia”. A pesar de que la norma se dará a conocer después de reunirse con sindicatos y patronal, ya está generando controversia dentro de la derecha. El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso se ha mostrado en contra de una reforma en la jornada laboral que propone Feijóo, y otros sectores del PP consideran un error plantear políticas que aumenten el gasto público.

Una de las propuestas más innovadoras de Feijóo es la concentración de la jornada laboral en cuatro días en lugar de los cinco actuales, lo cual es revolucionario en el contexto político de la derecha. Mientras que el Ministerio de Trabajo negocia una reducción de las horas laborales semanales, Feijóo se ha mostrado flexible al proponer la posibilidad de trabajar solo cuatro días a la semana sin reducir el número total de horas. Además, el líder del PP está dispuesto a respaldar la reducción a 37,5 horas si hay consenso entre sindicatos y patronal, a pesar de que la CEOE aún rechaza la propuesta.

Feijóo ha anunciado otros cambios en el ámbito de la conciliación familiar, como la ampliación de los permisos de paternidad y maternidad, y un aumento de la deducción fiscal por nacimiento de hijo. Estas medidas, junto con la propuesta de extender la gratuidad de las escuelas infantiles de cero a tres años en todo el país, suponen un aumento del gasto público que contrasta con el discurso del líder del PP sobre la deuda y las bajadas de impuestos. Algunos sectores más liberales del partido critican estas propuestas económicas y abogan por medidas de ahorro en lugar de aumentar el gasto público.

A pesar de las críticas y presiones internas, Feijóo mantiene su postura y defiende sus propuestas, argumentando que buscan seguir una línea europea y romper techos de cristal en el partido. Sin embargo, sectores más liberales del PP consideran que deberían centrarse en propuestas de corte liberal en lugar de aumentar el gasto público. La falta de una estrategia clara en el partido ha generado un debate ideológico intenso dentro de la derecha, con movimientos estratégicos alternantes entre posturas duras y blandas por parte de Feijóo.

En medio de este debate ideológico, Feijóo ha decidido retrasar el congreso del PP, el cual permite el debate de ideas, hasta 2026. A pesar de la presión para adelantar este congreso, el líder popular sigue su propia brújula y defiende sus propuestas, manteniendo su postura frente a las críticas internas. Aunque algunos sectores del partido ven con preocupación la falta de una estrategia clara, Feijóo se mantiene firme en su camino político, combinando propuestas sociales con encuentros con líderes de la derecha más dura, como la primera ministra ultra de Italia, Giorgia Meloni.

Share.
Exit mobile version